El grooming es una técnica de suplantación y engaño utilizada generalmente por adultos que desean contactar jóvenes para satisfacer principalmente sus perversidades sexuales o extorsionarlos, secuestrarlos o asesinarlos.
Un estudio hecho por la empresa Norton a nivel mundial, incluido Colombia, concluye que “El 40 por ciento de los menores reconoció haber aceptado como ‘amigo’ en sus redes sociales a un desconocido”[1].
Cómo funciona
El adulto crea un perfil en una red social como si fuera un joven. Contacta a otros por medio de la misma red o a través de chats. El joven acepta la invitación y comienza a establecer una relación virtual.
De acuerdo con Lénica González, fundadora de Sparky, una aplicación que permite actos de violencia en internet hacia menores, “el proceso desde que un criminal contacta a su víctima y logra obtener sus propósitos, fotos o contacto físico, puede durar seis meses”[2].
Qué puede generar[3]
Daños psicológicos:
Depresión infantil, descenso de la autoestima, desconfianza, cambios de humor repentinos y bruscos, bajo rendimiento académico, aislamiento, alteraciones del sueño y de la alimentación, ideas e intentos de suicidio…
Daños físicos:
Heridas, traumatismos o lesiones derivadas de los actos sexuales denigratorios, violaciones, embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual.
Daños a nivel familiar:
Falta o empeoramiento de las relaciones y de la comunicación a nivel familiar, chantajes a la propia familia por parte del acosador, etc.
Recomendaciones
Para los hijos:
- No aceptes invitaciones de extraños por internet. Las redes sociales son para estrechar vínculos con conocidos, no lazos de sufrimiento con desconocidos.
- Comparte con tus padres tus contactos de las redes sociales. Aunque no lo creas, ellos quieren lo mejor para ti y ellos serán quienes te apoyen realmente en una situación difícil.
- No aceptes la invitación a compartir contenido sexual. No te tomes fotos, no des información de ti y nunca aceptes verse juntos solos.
- Recuerda, ninguna víctima pensó que le pasaría a ellos. No te confíes que porque no crees que te pasará a ti, eso te protege.
Para los padres:
- La intimidad no tiene que ver con el descuido. Dejar a un joven solo construyendo relaciones no es respetar su intimidad es descuidar su bienestar. Debes acompañar a tu hijo. Conocer con quién se relaciona.
- Has parte de sus redes sociales. No eres su amigo, eres su padre. Un amigo puede ser rechazado o no, un padre no. Se nace con él.
- Crea una red de padres en el colegio de tu hijo. Habla con sus profesores, mantén contacto entre todos.
- Tu hijo no es inocente. Tampoco culpable, solo inexperto, ingenuo y muchas veces movido por emociones. ¿Te acuerdas cómo era? Acompáñalo siempre. Tal vez ahora lo deteste, sin duda después lo apreciará.
El mensaje de Dios.
El libro de los Proverbios nos muestra el consejo sabio, pertinente, actual y sobre todo amoroso de un padre a su hijo (Prov. 1:8). Frente al grooming esta voz, casi suplicante de quien conoce las terribles consecuencias de este flagelo, se hace aún más relevante.
En el cap. 7 las recomendaciones de este padre amoroso se centran en la elección por la sabiduría, en el rechazo por las invitaciones inapropiadas y a valorar las enseñanzas que se le están dando. Miremos algunos fragmentos del texto:
Prov. 7:1 Hijo mío, pon en práctica mis palabras
y atesora mis mandamientos.
2 Cumple con mis mandatos, y vivirás;
cuida mis enseñanzas como a la niña de tus ojos.
3 Llévalos atados en los dedos;
anótalos en la tablilla de tu corazón.
4 Di a la sabiduría: «Tú eres mi hermana»,
y a la inteligencia: «Eres de mi sangre.»
5 Ellas te librarán de la mujer ajena,
de la adúltera y de sus palabras seductoras.
21 Con palabras persuasivas lo convenció;
con lisonjas de sus labios lo sedujo.
22 Y él en seguida fue tras ella,
como el buey que va camino al matadero;
como el ciervo que cae en la trampa
23 hasta que una flecha le abre las entrañas;
como el ave que se lanza contra la red,
sin saber que en ello le va la vida.
24 Así que, hijo mío, escúchame;
presta atención a mis palabras.
25 No desvíes tu corazón hacia sus sendas,
ni te extravíes por sus caminos,
26 pues muchos han muerto por su causa;
sus víctimas han sido innumerables.
27 Su casa lleva derecho al *sepulcro;
¡conduce al reino de la muerte!
Es verdad que la Biblia no habla en los términos tecnológicos actuales, pero ella si ofrece fundamentos que nos permiten afrontar los desafíos del mundo contemporáneo. Escuchar, atender el consejo y no seguir el llamado de quien con seducción y engaño invita son elementos prácticos para evitar las terribles consecuencias de este mal cibernético.
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[1] http://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-12587069
[2] http://www.milenio.com/cultura/grooming-nuevo-ciberdelito-Mexico_0_506949312.html
[3] : http://bullying-acoso.com/consecuencias-del-grooming-o-ciberacoso
